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Gramíneas

La familia botánica de las Gramíneas es una de las más numerosas, y consta de casi 700 géneros y

unas 12.000 especies. Se calcula que las Gramíneas suponen un 20% de la superficie vegetal del mundo. Constituyen la fuente de alimentación animal básica (los pastos son básicamente gramíneas) y humana (el trigo, la cebada, el centeno, el maíz, la avena, el arroz, la caña de azúcar, etc. son gramíneas).

 

El las fotografías adjuntas se puede ver alguno de los géneros de Gramíneas silvestres  más comunes en España capaces de producir alergia. Dentro de ellas destacan los Caracolillos (Dactylis glomerata), la Hierba Timotea (Phleum pratense), el Ballico (Lolium perenne), la Espiguilla (Poa pratensis), el Césped (Cynodon dactylon), etc., todas ellas fácilmente identificables en cunetas, prados, herbazales, ribazos, etc.

El polen de estas Gramíneas suele tener un diámetro de 20-45 µm (lo que le permite una penetración bastante profunda en las vías respiratorias). Tiene forma esférica, de superficie granulada y con un único opérculo. Existe una reactividad cruzada muy alta entre los pólenes de diferentes géneros de Gramíneas, de forma que cuando un paciente se hace alérgico a uno de ellos, será seguramente alérgico también a la mayoría de los otros pólenes de esta familia.

Existe una notable relación entre la pluviosidad pre-estacional y la polinización de las Gramíneas. Así, cuando en un período de tiempo que va mas o menos de octubre a marzo (dependiendo de la zona geográfica) llueve mucho, es probable que en primavera la concentración de polen de Gramíneas sea asimismo muy elevada.

Debido a la gran cantidad de especies diferentes de Gramíneas (cada una de ellas con su particular período de floración) y a las variaciones dependientes de las condiciones climatológicas, es posible detectar pólenes de Gramíneas en el ambiente a lo largo de 6-10 meses del año. Sin embargo, el pico más importante suele localizarse en los meses de abril-mayo-junio.

Se calcula que por encima de una concentración de polen calculada en unos 10-50 granos por metro cúbico de aire los pacientes con alergia a estos pólenes ya pueden notar síntomas, aunque ello varía notablemente de unos pacientes a otros, dependiendo de:

  • La intensidad de la alergia de cada paciente particular
  • Que el paciente tenga o no alergia a pólenes de otras plantas que pueden polinizar en la misma época
  • De las condiciones atmosféricas concurrentes
  • Del nivel de exposición (ej: cortar el césped,…)

** Fotos (c) Menarini, S.A. – Hospital Clínico de Barcelona
*** Foto cedida por el jardín botánico de la UTAD (Portugal)